¡MI NOMBRE ES YAIZA! Y ESTA ES MI HISTORIA...

Desde muy pequeña encontré en la fotografía una forma de expresarme y enseñar el mundo desde mi perspectiva.

De niña no conseguía que las fotos saliesen tal cual yo estaba viendo ese paisaje, ese objeto, esas personas... y siempre pensaba que ojalá nuestros ojos pudieran usarse como cámaras y al parpadear muy fuerte hiciésemos la foto tal cual la estamos viendo, tal cual la estamos viviendo.

Todavía no ha llegado ese día pero me decidí a estudiar imagen audiovisual; y gracias a eso, a mi interés y mi esfuerzo, conseguí transmitir mucho más a través de la fotografía.

Durante varios años tuve mi propio estudio pero tuve que poner fin a esa etapa, y la vida me llevó a vivir en México durante una temporada trabajando de au pair. Fue allí donde entendí que los viajes cobraban mucho más sentido cuando te involucras con la gente local y cuando conoces el lugar dejando a un lado el turismo de masas.

Un año después de mi vuelta a España, me embarqué en una nueva aventura con una amiga mexicana. Un viaje por diferentes ciudades de Europa que organicé de principio a fin; que me sirvió para darme cuenta de que, además de viajando, disfrutaba mucho organizando viajes.

Pero una vez más, sentía que había mucho más por descubrir y conocer en los sitios a los que iba; y que visitando solamente los lugares típicos me estaba perdiendo experiencias mucho más auténticas. Es por eso que la manera convencional de viajar se me quedó corta.

Esas experiencias me llevaron a decidir que, además de a la fotografía, quería dedicarme a diseñar y coordinar viajes.

Después de formarme durante la cuarentena y apostar por los viajes en un momento en el que no sabíamos cómo iba a ser la nueva realidad; compartí un proyecto que hice crecer y a través del que coordiné mi primer viaje grupal. Compartiendo con otros viajeros una inmersión cultural y aportando nuestro granito de arena a proyectos sociales preciosos.

Siempre he sentido una gran pasión por viajar y conocer nuevos lugares. Los viajes tienen mucho protagonismo en mi vida, porque siento que son una de las mejores formas de crecimiento personal. A través de ellos he podido conocerme mejor a mí misma, y afrontar miedos e inseguridades que me han llevado a ser la persona que soy ahora.

He creado Con el Viento en los Talones para que otras personas puedan sentir cómo viajar les cambia la vida; y cómo a través de la fotografía podrán ver el mundo de una manera distinta.